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¿Por qué hay que entregar el vehículo al desguace?

Hoy por hoy entregar el vehículo al desguace es la forma correcta y ecológica de deshacerse de un coche. Cuando un automóvil ha llegado al final de su vida útil decidir qué hacer con él puede ser un problema. 

Para que tengas claro cuáles son los pasos que debes seguir y qué consigues con ello, te lo comentamos con detalle.

Entregar el vehículo al desguace, tu centro autorizado

Cuando tenemos que deshacernos de un coche solemos pensar que hay que acudir a la Dirección General de Tráfico, pero lo cierto es que no. Actualmente los desguaces son los Centros Autorizados de Tratamientos de vehículos (CAT) esto quiere decir que, oficialmente, son los encargados de gestionar los coches que ya no van a circular. 

Los motivos por los que un coche acaba su vida útil son varios, principalmente porque tiene averías o problemas técnicos en los que no merece la pena invertir o porque se ha sufrido un accidente y el coche ha sido declarado como siniestro

Pero también el motivo para deshacerse de un coche puede ser simplemente que se quiere cambiar de modelo aunque el nuestro funcione perfectamente. 

En cualquier caso, un CAT como Desguaces Plaza es donde te facilitarán el certificado de destrucción del vehículo y donde te entregarán el justificante de baja definitiva, documentos que necesitarás para acreditar que todo se ha realizado correctamente. 

Entregar vehículo desguace

Entregar el vehículo al desguace, respeto por el medio ambiente

Además de realizar las gestiones de acuerdo a las normas vigentes, al entregar el vehículo en un centro autorizado de tratamiento estás actuando de manera ecológica. En Desguaces Plaza seguimos una política medioambiental que promueve una gestión eficiente de los residuos y que fomenta la reutilización de piezas

Esto quiere decir que al entregar el vehículo en el desguace se realiza un estudio del coche y, en caso de que no pueda seguir en circulación, se sacan todas las piezas que estén en buen estado y que puedan servir como repuesto a otros coches. Después el combustible, el aceite y otros líquidos se extraen para su correcta gestión y las partes que ya resultan inservibles se achatarran. 

De esta manera se consigue el máximo aprovechamiento sin dañar el entorno