Tener un coche nos facilita mucho la vida, pero también es cierto que genera unos gastos importantes. Cuando una pieza clave como el motor falla hay que buscar una solución y una de las opciones más rápidas y económicas son las piezas de segunda mano. Descubre lo que puedes ahorrar con el precio de un motor de desguace.
Ahorro de un 70% con el precio de un motor de desguace
La reparación de un motor puede ser realmente cara y además, según las circunstancias, puede que solo sea un parche muy costoso que en poco tiempo nos deja tirados. La opción de comprar un motor nuevo es buena desde el punto de vista técnico, pero mala desde el económico, ya que el coste puede ser muy elevado. A esto hay que añadir la disponibilidad. Actualmente estamos en una situación en la que hay falta de algunos suministros, el tiempo de espera es largo e incierto.
Frente a esto, están los motores usados. Motores enteros o piezas de motores de coches que han dejado de circular. Cada pieza que se vende en un desguace se ha revisado, testado y puesto a punto.
De esta manera se puede garantizar que se encuentra en buen estado y que nos va a permitir seguir circulando.
A estas ventajas se suma el coste, el precio de un motor de desguace puede ser hasta un 70% menos que el de un motor nuevo.
Un acto de sostenibilidad
El precio desde luego que es un motivo de peso, pero comprar un motor de segunda mano es también un acto de responsabilidad. En el mundo en el que vivimos es cada vez más necesario, contribuir a la sostenibilidad del planeta. Comprar cosas, motores, de segunda mano ayuda a la reutilización de recursos, a frenar la emisión de CO2 a la atmósfera, a gestionar los residuos de manera eficiente para no contaminar.
Eso es la economía circular, una filosofía empresarial de la que somos partícipes y en la que queremos que colabores con nosotros.